martes, 14 de julio de 2009

Filosofadas patilleras III: La filosofía positiva, la magia blanca y la madre que las parió

"Tienes que pensar en positivo para que las cosas te salgan bien". Frase repetida una y otra vez por libros de autoayuda, psicoterapeutas de tres al cuarto y seguidores acérrimos de filosofías orientales, homeopatías y demás formas de "magia blanca" socialmente aceptadas en la actualidad.

No he oído mayor patraña en toda mi vida.

Acaso pensar que te va a tocar la lotería va a hacer que realmente el numerito que lleva tu boleto caiga del bombo? Acaso imaginarte a tu vecina la del cuarto (la que tiende los tangas de leopardo en el patio) desnuda en tu habitación va a conseguir que acepte una proposición de cena romántica contigo? De verdad crees que desear que tu odioso jefe se coja unas vacaciones definitivas va a influir lo más mínimo al Todopoderoso Creador para que por fin le llame a su lado y te libre de él para siempre?

De hecho, a eso en mi pueblo se le llama "magia", y no a lo que hace David Copperfield, como hacer desaparecer elefantes y cutradas parecidas. Supongo que en este caso sería "magia blanca", pero de cualquier forma, por creer cosas semejantes quemaban a la gente en la Edad Media.

Es también interesante saber que hay un término en psicología llamado el "pensamiento mágico", que desarrolla gente con Trastornos Obsesivo-Compulsivos, y que consiste precisamente en lo contrario a lo que estoy describiendo. Es decir, en temer que, si piensas que te va a atropellar un coche, o que a tu mujer le va a crecer un pene enorme de un día para otro, esto ocurra realmente.

Desde mi punto de vista es exactamente lo mismo, pero al revés. Total, que si tienes "pensamiento mágico" negativo, te llaman obsesivo y te cargan de antidepresivos y ansiolíticos, pero si tu "pensamiento mágico" es (llamémosle) positivo, entonces te llaman optimista, y encima está socialmente bien visto y eres una pesona admirada.

No he visto mayor injusticia en toda mi vida.

De hecho, creo que el optimismo está sobrevalorado. Todo el mundo conoce el desagradable sentimiento de decepción que produce una expectativa no cumplida. Cuanta mayor ilusión te hace quedar con la vecina del tanga, mayor va a ser después la hostia cuando te diga aquello de "No, lo siento, pero podemos ser amigos". Ya te vale, amigos no necesito, amigos ya tengo, pero no tienen ese culo. En cambio, si vas ya puesto en lo peor, todo resultado infinitesimalmente mejor que lo esperado hace una ilusión tremenda. Si vas a la batalla dispuesto a ser humillado de la peor de las maneras, y al final la vecinita no sólo te abre la puerta, sino que encima te habla (te habla!! y te mira, con esos ojazos que dios le ha dado!!), te puedes ir a casa más contento que un niño con zapatos nuevos.

Y encima, nadie me va a negar que tiene muchísimo más valor pelearse con un enemigo al que ves como una horda de Orcos sedientos de sangre, que robarle los caramelos a alguien porque piensas que es un niño indefenso.

En fin, que he decidido llevar mi pesimismo con la cabeza bien alta, defenderlo a capa y espada, y hacer de él mi arma de batalla diaria frente a la magia blanca tan promovida hoy en día, y que tantas decepciones provoca. Soy un pesimista, y estoy orgulloso. :P

Todo muy patillero, ya lo sé, pero el que quiera (o pueda) que me entienda. Además, para eso es este mi blog, para escribir lo que me de la gana. Hala, a cuidarse.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

pues yo creo que hay una pequeña diferencia entre el "optimista" que se siente decepcionado cuando descubre que la mujer del tanga de leopardo no va a aparecer en su habitacion y el "optimista" que decide fijarse en otra vecina diferente una vez que descubre que esa es imposible..... se puede ser optimista y realista al mismo tiempo....

Hermanita Pequeña

Shadowman dijo...

Pero eso no sería optimismo, sería ser inteligente :) Es otra cosa diferente.

Gracias por leerme.

Anónimo dijo...

No, eso seria ser optimista, lo otro seria ser un poco ingenuo, o iluso o ..... podria buscarte miles de sinónimos

Anónimo dijo...

Le has dicho a la vecina del tanga que te gusta??? Pq igual es que no se entera. No se digo yo...

Como me chive a mi amiga la bruja blanca de tu filosofía patillera te va a dar un chorreo de optimismooooooooooooooooooooooooooooooo jajajjajajajjajaj

Anónimo dijo...

No he firmado pero ya sabes quien soy no??
Hermanita Mayor (y herniada)

Shadowman dijo...

Me he dao cuenta, hermanita. :)
No te chives, que me corre a gorrazos hasta Huelva. :P

Porverita dijo...

Pues para mí, que lo mejor es no pensar nada..., ni ponerse en lo bueno, ni en lo peor.

Lo mejor es no ponerse de ninguna forma: actuar.

Es bueno estar haciendo siempre algo, lo que sea.

No sé, quizá le llamen a esto "filosofía de la acción".

Prueba a pedirle a la vecina azúcar o café, y luego, para devolverle el favor, la invitas a tu apartamento -que habrás de limpiar antes- a tomar ese café.

Quizá eso ya no te compense tanto.