miércoles, 12 de agosto de 2009

Bob Brozman: EL MÚSICO

Discutía no hace mucho con mi amigo Paco (con unas cañitas delante, por supuesto) sobre la música en general. Le decía que a mi, la música moderna actualmente me parece que está cada día más prostituída. Me da la impresión de que el negocio de la música ha pervertido la esencia de algo que, bajo mi humilde punto de vista, debería tener un sentido artístico y de expresión emocional. Y a veces pienso que las únicas músicas que siguen siendo realmente sinceras son aquellas con raíces tradicionales, léase blues, flamenco, etc. Paco, que es un tío muy rockero, muy contemporáneo, y que le gusta discutir aún más que a mi, me vino a decir que era un sibarita y un retrógrado. Lo digo sin acritud, Paco, fue de forma muy educada, eso sí :P. Y claro, cuando la mayoría de músicos que escuchas están ya criando malvas o les falta poco, no puedes evitar quedarte con la idea de que quizás es cierto, quizás es que soy ya un poco "puretilla".

Pues bueno, recientemente he encontrado en YouTube un vídeo sobre un individuo llamado Bob Brozman, donde este hombre viene a decir un poco lo mismo. ¿Quizás mis teorías no son tan peregrinas y trasnochadas? :) El caso es que conocí (musicalmente hablando) a este señor muy recientemente, a través de un libro suyo sobre técnicas para guitarra slide que cayó en mis manos. Luego he buscado vídeos y cosas suyas por internet. Es un músico americano que toca blues, jazz, ragtime, música caribeña y, viéndolo tocar, seguramente todo lo que le venga en gana. Ha dado clases de música y está metido en proyectos para intentar llevar instrumentos musicales a los músicos del tercer mundo.

Y bueno, mi conclusión con lo que he visto hasta ahora es, de forma resumida, que aparte de ser un virtuoso del bottleneck y la guitarra blues, debe ser una de las personas que más saben de música ahora mismo. Y uno de los músicos que más disfrutan de esa esencia de la música de la que hablaba antes.

Os recomiendo que veais el video, está en inglés con subtítulos en francés (Paco, a practicar el inglés!), pero no tiene desperdicio. Para empezar, Brozman se autodefine como guitarrista, anarquista y antropólogo. Y aparte de haberme robado algunas de mis teorías sobre la música :P, dice un montón de cosas interesantes sobre su forma de entender este arte. No es un músico famoso, ni quiere serlo según dice él mismo, pero se le ve vivir más la música que cualquier "Estrella del Pop" actual que esté en las listas de éxitos. También explica otras teorías muy curiosas, como la diferencia entre la música de los pueblos "colonizadores" (donde incluye explícitamente a los USA y Alemania) y de los pueblos "colonizados". No os lo voy a explicar, tendreis que ver el vídeo :P

Ésto sí es un MÚSICO. Con letras mayúsculas.

Cuídense.


viernes, 7 de agosto de 2009

The Blues, man, this is the Fuckin' Blues

He encontrado ésto cuando estaba surfeando por YouTube en busca de viejos clásicos del Blues. Pero Blues con mayúsculas, me refiero a los viejos maestros del Delta del Mississipi y compañía, no a todos los que después han saqueado y explotado (para bien en muchos casos, no se me malentienda) aquellas obras maestras.

Este es un tipo que se hacía llamar Black Ace. Tocaba un dobro del estilo de los míticos National puesto sobre el regazo, como los músicos de country, pero... con una botella de cristal. Una puta botella de cristal. Sabía que la palabra "bottleneck" procede precisamente de la costumbre que tenía esta gente de tocar con un cuello de botella, pero este señor no se molestaba en romper el cuello. Directamente tocaba con la botella entera. Supongo que así luego le servía para guardar el licor ilegal que destilaba en el sótano. Un tío pragmático.

Después de ver cosas como esta no puedo evitar sentir vergüenza ajena cada vez que veo por la tele a toda la purria del pop actual, incluyendo triunfitos y compañía. ¿Retrógrado? Seguramente. Pero, aunque tampoco escucho esta música todos los días, no puedo evitar ver mucha más sinceridad en la botella de Black Ace que en cualquier videoclip de la MTV. Además, ha de haber gente pa todo, no? :P

Ah, absténganse de ver el vídeo si su idea de buena música es eso que se escucha en las discos los viernes por la noche, todo puesto de pastillas y bebiendo agüita. Esto es el Blues, chavales. El Puto Blues. The Fuckin' Blues.

Con ustedes Black Ace, tocando una canción con el mismo nombre: Black Ace (¿autobombo? Os dije que era un tío pragmático).

jueves, 6 de agosto de 2009

Frases para la historia II: Maquillaje antibalas

Hoy, con ustedes, en el apartado de grandes frases para la historia, una frase extraída de un anuncio de TV que pienso que tiene mucho que aportar al ser humano en el plano psicológico-espiritual:

"Yo no soy infalible, mi barra de labios lo es por mi".

La frase está extraída de un anuncio de L'Oreal, más concretamente de pintalabios, como ya habreis adivinado si no os caisteis de la cuna cuando erais pequeños. Como la mayoría de la publicidad de productos de estética, estareis de acuerdo en que no tiene desperdicio. De hecho estoy pensando en hacer un estudio serio sobre el tema. Creo que me sentaré delante del televisor con una libretita y un boli e iré apuntando todos estos eslogans lapidarios con que nos obsequian los brillantes cerebros de los publicistas de las compañías de este tipo de productos. Estoy seguro de que se puede sacar de ahí material suficiente para una tesis.

Desde luego, lo primero que a uno le viene a la cabeza al escuchar esta frase es: ¿¡De qué coño está hecho ese pintalabios para ser infalible?! ¿!De kevlar?! ¿Es el que llevan los marines estadounidenses el día del orgullo gay? En fin, dejando la cuestión de la composición aparte, me parecen mucho más interesantes las implicaciones psicológicas de la frase. La cuestión que más despierta mi interés es: ¿Exactamente qué pasa por la cabeza de una mujer del tipo que necesita un maquillaje hecho de material antibalas porque así se sienten más protegidas?

Mmmmm... tic tac tic tac tic tac...

Uf, lo siento pero me he quedado en blanco, no puedo ni imaginármelo. Tener una conversación con una mujer así tiene que ser una experiencia irrepetible. Irrepetible porque no te deben quedar ganas de repetir.

Aún a riesgo de que se me tire la caballería encima, no puedo evitar pensar que es curioso que a los hombres se nos tache de machistas y hasta de superficiales pero después se ponga como ejemplo de mujer a alguien así. En fin. Y como último pensamiento, me parece paradójico que se censuren ciertos anuncios por sexistas u ofensivos (cosa que sucede) y en cambio nadie se queje cuando se pinta a las mujeres como un ser que no es nada sin su barra de labios "antibalas", y encima pretenda ser un "modelo" de mujer. En fin pikolín.

Me voy ya, que viene la caballería... :P

martes, 21 de julio de 2009

CSN en Manchester

El fin de semana del 11 y 12 de julio estuve en Manchester, viendo a... (pónganse en pie, un poco de respeto, por favor) Crosby, Stills y Nash. Sí señor. Todo un placer ver a semejantes "dinosaurios" (en el buen sentido) de la música.

Hay que decir para ser realista que Stephen Stills estaba algo flojillo, cantó menos que sus colegas y se le veía menos animado. No sé si es que la edad no perdona o no tenía un buen día. Pero a David Crosby y a Graham Nash se les veía como dos chavales disfrutando en el escenario, bromeando y hablando con el público. Además, Nash resulta ser de Salford, Manchester (cosa que yo ignoraba), con lo cual supongo que se creció al estar tocando en casa. Y estos dos señores siguen cantando igual de bien que siempre, si no mejor. Esperemos que lo de Stills sea una mala tarde.

Aparte de eso, el fin de semana en Manchester pues bien, lo típico: pintas de cerveza, lluvia pa aburrir, mujeres enloquecidas vestidas con lo más hortera que han encontrado, y garrulos ingleses con la cabeza afeitada porque así se sienten más hombres. Todo en regla.

Por cierto, si alguien busca un hotel barato en Manchester yo le puedo indicar uno: 24 libras la noche. Insuperable. Ah, imprescindible que no te molesten las telarañas, claro. Ah, y que te dé igual que se caigan las baldosas de la ducha, literalmente.

Os dejo con una de mis canciones favoritas de todos los tiempos:

miércoles, 15 de julio de 2009

Morrison's Jig

Shadowman tocando el banjo irlandés. Una jiga tradicional irlandesa. El sonido no es fantástico, ni lo es la ejecución (hay enganchada de dedos en el compás número 27), pero hace tiempo que quería aprender esta canción. Tocada más deprisa y con más instrumentación siempre me ha evocado una imagen: las hordas del Clan McLoud lanzándose a la batalla, dispuestos a enfrentarse al enemigo en campo abierto.

Cosas que pasan por la mente de uno.

martes, 14 de julio de 2009

Filosofadas patilleras III: La filosofía positiva, la magia blanca y la madre que las parió

"Tienes que pensar en positivo para que las cosas te salgan bien". Frase repetida una y otra vez por libros de autoayuda, psicoterapeutas de tres al cuarto y seguidores acérrimos de filosofías orientales, homeopatías y demás formas de "magia blanca" socialmente aceptadas en la actualidad.

No he oído mayor patraña en toda mi vida.

Acaso pensar que te va a tocar la lotería va a hacer que realmente el numerito que lleva tu boleto caiga del bombo? Acaso imaginarte a tu vecina la del cuarto (la que tiende los tangas de leopardo en el patio) desnuda en tu habitación va a conseguir que acepte una proposición de cena romántica contigo? De verdad crees que desear que tu odioso jefe se coja unas vacaciones definitivas va a influir lo más mínimo al Todopoderoso Creador para que por fin le llame a su lado y te libre de él para siempre?

De hecho, a eso en mi pueblo se le llama "magia", y no a lo que hace David Copperfield, como hacer desaparecer elefantes y cutradas parecidas. Supongo que en este caso sería "magia blanca", pero de cualquier forma, por creer cosas semejantes quemaban a la gente en la Edad Media.

Es también interesante saber que hay un término en psicología llamado el "pensamiento mágico", que desarrolla gente con Trastornos Obsesivo-Compulsivos, y que consiste precisamente en lo contrario a lo que estoy describiendo. Es decir, en temer que, si piensas que te va a atropellar un coche, o que a tu mujer le va a crecer un pene enorme de un día para otro, esto ocurra realmente.

Desde mi punto de vista es exactamente lo mismo, pero al revés. Total, que si tienes "pensamiento mágico" negativo, te llaman obsesivo y te cargan de antidepresivos y ansiolíticos, pero si tu "pensamiento mágico" es (llamémosle) positivo, entonces te llaman optimista, y encima está socialmente bien visto y eres una pesona admirada.

No he visto mayor injusticia en toda mi vida.

De hecho, creo que el optimismo está sobrevalorado. Todo el mundo conoce el desagradable sentimiento de decepción que produce una expectativa no cumplida. Cuanta mayor ilusión te hace quedar con la vecina del tanga, mayor va a ser después la hostia cuando te diga aquello de "No, lo siento, pero podemos ser amigos". Ya te vale, amigos no necesito, amigos ya tengo, pero no tienen ese culo. En cambio, si vas ya puesto en lo peor, todo resultado infinitesimalmente mejor que lo esperado hace una ilusión tremenda. Si vas a la batalla dispuesto a ser humillado de la peor de las maneras, y al final la vecinita no sólo te abre la puerta, sino que encima te habla (te habla!! y te mira, con esos ojazos que dios le ha dado!!), te puedes ir a casa más contento que un niño con zapatos nuevos.

Y encima, nadie me va a negar que tiene muchísimo más valor pelearse con un enemigo al que ves como una horda de Orcos sedientos de sangre, que robarle los caramelos a alguien porque piensas que es un niño indefenso.

En fin, que he decidido llevar mi pesimismo con la cabeza bien alta, defenderlo a capa y espada, y hacer de él mi arma de batalla diaria frente a la magia blanca tan promovida hoy en día, y que tantas decepciones provoca. Soy un pesimista, y estoy orgulloso. :P

Todo muy patillero, ya lo sé, pero el que quiera (o pueda) que me entienda. Además, para eso es este mi blog, para escribir lo que me de la gana. Hala, a cuidarse.

jueves, 11 de junio de 2009

Stagefright

"See the man with the stage fright
Just standin' up there to give it all his might.
And he got caught in the spotlight,
But when we get to the end
He wants to start all over again."


Robbie Robertson - The Band


viernes, 29 de mayo de 2009

Frases para la historia I

Inauguro con esta entrada una nueva sección dedicada a aquellas frases de grandes filósofos y pensadores, a aquellas que le hacen pensar a uno... que le hacen pensar a uno que el que las ha dicho o bien tenía un día muy desafortunado, o bien ha decidido poner el cerebro en modo tobogán sin enconmendarse a dios ni al diablo (nunca mejor dicho, en seguida entenderán porqué), o simplemente la única neurona que les queda está de baja por estrés.

Dice el Sr. Ricardo Benjumea, Redactor Jefe de la revista "Alfa y Omega" (tela marinera con el título), el semanario católico del Arzobispado de Madrid (buenos días, Sr. Varela, ¿hay alguien ahí?):

"Reducido el sexo a simple entretenimiento, ¿qué sentido tiene mantener la violación en el Código Penal?"

Un aplauso... plas, plas, plas... Creo que realmente no necesita comentarios, y quiero pensar que la frase está sacada de contexto, pero la cosa venía a cuento del tema de la pastilla del día después. Me parece entender que el razonamiento de este ser humano (hoy me siento generoso) es algo así como: si te tomas la pastillita, el sexo pasa a ser solo un divertimento. Hasta aquí no veo el problema, pero continuemos. Si el sexo es sólo un divertimento, entonces quizás la violación no debería ser delito.

...

Lo siento, se me ha puesto la mente en blanco durante unos segundos, es un efecto que me producen a veces este tipo de razonamientos. Es una sensación extraña, como si la realidad fuera inconexa, como si en algún punto se perdiera la lógica continuidad del espacio-tiempo y hubiera un salto que mi mente no ha sabido procesar. ¿Será un fallo en Matrix? ¿Estaremos viviendo una falsa realidad? ¿Estaré atrapado, sin saberlo, en un universo paralelo? Uf, me está dando miedo tot plegat, así que mejor lo dejo.

Lo siento, pero no soy capaz de seguir, me está dando la angustia existencial otra vez...

Otro día, más. :P

viernes, 15 de mayo de 2009

Burrocracia (4ª parte... y última?!)

Anteriormente, en "Burrocracia":

El otro día llego a casa de trabajar, a las tantas como es habitual. Entro en el portal, abro el buzón para comprobar el correo... y hay algo... algo que parece... espera... no puede ser... sí... no... dios que nervios... LO ES! Una factura de la luz!! Y debe estar... (la abro apresuradamente, la emoción me embarga).. Sí! Está a mi nombre!

Subo las escaleras corriendo, no puedo esperar a explicarle a todo el mundo la buena noticia... luego recuerdo que vivo solo... vaya, no puedo explicárselo a nadie. Es igual, lo que cuenta es que, teóricamente, ahora ya dispongo de un documento en regla para poder empadronarme en mi barrio, Hostafrancs, Barcelona. Pronto la lucha habrá llegado a su fin, se me hace un nudo en la garganta... pero me contengo. No debo cantar victoria antes de tiempo, debo mantener la mente fría, el enemigo seguramente tiene muchas tretas escondidas, y no debo confiar en que ésta batalla sea fácil.

Al día siguiente me levanto temprano, con toda la ilusión de que soy capaz a esas horas. Yo y mi primo el karateka nos vamos al Ayuntamiento una vez más. Hago la cola para coger número, por suerte no hay mucha gente esta vez. Me atiende una señorita, le expongo por enenenenésima vez en esta vida a qué voy, le enseño el documento que traigo en esta ocasión, para que me confirme su validez. "Sí, esto sí que le sirve". No me lo puedo creer, es posible? Quizás después de todo mi esfuerzo no ha sido en vano?

Entro al interior de la oficina, me siento pero al poco rato mi número aparece en la pantallita. Me dirijo al mostrador número 7, tal como indica la misma pantallita. El corazón resuena en mi pecho como un bombo de procesión de Semana Santa. "Pues verá, que quería cambiar mi dirección en el padrón, le traigo esta factura. Como puede ver, está a mi nombre...". Cruzo los dedos. El hombre examina el documento y empieza a teclear en el ordenador. Toda mi vida pasa por delante de mi en unos segundos, los buenos momentos, los momentos de angustia, de dolor... Es difícil aceptar que, después de todo, quizás nada haya valido la pena...

"Aquí tiene, su certificado de empadronamiento".

Las palabras del funcionario me sacan de mi ensoñación. Aún resuenan en mi mente cuando veo delante de mi un papel, un documento dónde... sí, efectivamente, se certifica que yo resido en el barrio de Hostafrancs, calle Tal y Tal, 08014, Barcelona. Lágrimas de emoción empiezan a resbalar por mis mejillas. Le doy efusivamente las gracias al funcionario y salgo a la calle desbordante de alegría.

Corro por la calle, felicitando la Navidad a todo el vecindario a grito pelado, con un pavo debajo del brazo. Todo está cubierto de blanco, los niños han construído un muñeco de nieve en mitad de la calle. Me paro un momento a participar en su guerra de bolas de nieve, me rio con ellos. Luego sigo mi camino, y desaparezco entre el gentío, tarareando una alegre tonada...



Epílogo

El optimismo que mi ansiada y esperada victoria me ha producido me ha dado la valentía suficiente como para enfrentarme dos veces en una misma mañana al despiadado monstruo de la burocracia. Así que me acerco al CAP de mi barrio con la intención de inscribirme allí, ahora que por fin tengo en mi poder el certificado de empadronamiento.

Un mostrador más, una funcionaria más, esta vez con bata. "Que quería inscribirme en este CAP", y con voz triunfal anuncio: "aquí traigo el certificado de empadronamiento". Ella lo coge, trastea durante unos momentos en el ordenador, imprime otro documento y me lo entrega. "Aquí tiene, le devuelvo también el papel del padrón, parece ser que no me lo ha pedido".

Se me pone cara de tonto. "No me lo ha pedido?" Qué quiere decir "no me lo ha pedido?" No entiendo nada. Es que el sistema tiene unos requerimientos diferentes, según el día que vas y el tiempo que hace? Porque la última vez me dijeron que hacía falta el PUÑETERO DOCUMENTO (con perdón)!!!!! Casi me pego con tropecientos funcionarios, y ahora resulta que "no me lo ha pedido"?!?!

En fin, que después de tanto ajetreo y tanta batallita, la única conclusión es que cada día entiendo menos sobre la PUÑETERA BURROCRACIA de este país. Lo único que uno puede hacer cuando requiere un documento oficial es armarse de valor, llamar al primo karateka y estar dispuesto a perder el tiempo que haga falta y a pegarse con quien sea menester. La verdad, debería haber una forma más fácil de hacerlo todo, la vida no puede, no debería ser tan complicada. Recemos a San Bill Gates para que un día se le ocurra hacer algo realmente útil para la humanidad, algo así como un supersistema informático que unifique todos los datos y los procedimientos burocráticos del mundo y que jubile (o fulmine) de una vez y para siempre a tanto burócrata y tanto funcionario inútil.

Pero bueno, hasta entonces, seguiremos soñando. Y explicando batallitas.

Buenas noches y buena suerte.

miércoles, 13 de mayo de 2009

Filosofadas patilleras II: Equivocarse

Hoy he desayunado en un bar que tenía, colgadas en las paredes, fotos y frases de famosos. Mientras intentaba abrir los ojos a fuerza de café, me he fijado en algunas de ellas. De entre las fotos, la que más me ha gustado ha sido ésta, que he encontrado también por internés.

De hecho, esto no tiene nada que ver con el tema de este post, pero no me negareis que no tiene desperdicio. Aaaay Humphrey Humphrey!! Qué estarías mirando, pollo!!

Y de las frases, me quedo sin duda con ésta:

"Todo el mundo puede equivocarse, por eso los lápices vienen con una gomita en la parte de atrás."

Adivinais quién la dijo? Efectivamente, un gran sabio y filósofo, ni más ni menos que Lenny, de los Simpson.

Y que haya tenido que ser un dibujo animado el que lo diga... Es más, que haya sido un personaje que, según parece, lo único que tiene que hacer todo el día es estar pimplando cerveza en el bar de Moe! (envidiable vida, por otra parte).

Porqué estamos tan obsesionados con equivocarnos? Porqué tenemos tanto miedo? Organizamos nuestra vida de tal forma que intentamos ultraprotegernos al máximo y controlar absolutamente todo lo que nos sucede. Y cual es el resultado? Uno, que nos seguimos equivocando, y dos, que nos volvemos unos cobardes.

Supongo que todos hemos hecho cosas que preferiríamos no haber hecho. Siempre he pensado que el típico valiente que dice "Yo no me arrepiento de nada" o está mintiendo, o no ha salido de su casa en su vida. Y algunas de esos errores nos marcan de por vida, pero en el momento en que las hicimos eran inevitables. No es que quiera ponerme en plan "filosofía positiva", que cada día me da más grima ese rollo, pero si para algo debería servir pasarlo mal es para aprender a solucionar marrones.

Y esa es la cuestión, creo yo... marrones seguirá habiéndolos toda la vida, por mucha armadura que uno se ponga, y por mucho que uno enfoque las cosas "de forma positiva". La cuestión es aprender a usar la gomita que viene en la parte de atrás, aprender a "improvisar" una solución.

Y ahora os dejo, que tengo que ir a cometer unos cuantos errores.

sábado, 2 de mayo de 2009

El probe caminante

Una entrada dedicada a mi tía la Porverita, pa que vea que, efectivamente, los versos que le cantaba en el metro hace poco (hay que decir que llevaba dos copitas de vino), los cantaba Camarón en "El caminante".
Son unas bulerías de Antonio Sánchez, si no me equivoco el padre de Paco de Lucía, que aquí le acompaña a la guitarra.

"Si te vas a confesar
no digas nunca las ducas
que me haces de pasar."

Y otra aún mejor:

"Tú no me des tanto que hacer,
que como coja la puerta
nunca más me vas a ver."

Tremendo :)

Ay lai looo lolailololaiiiloooooo laaaai lololailololaaaaailoooo

viernes, 24 de abril de 2009

Filosofadas patilleras I: La Teoría del Ser Irracional

Me permito con este post iniciar una sección dedicada a "Filosofadas patilleras". O dicho de otra forma, a todos aquellos pensamientos pseudofilosóficos que a todos nos gusta desarrollar de vez en cuando (normalmente es en la barra de un bar y con un colega, pero no es indispensable), y que tienen la característica y la ventaja de que, puesto que son indemostrables, también son irrebatibles, y por lo tanto son absolutamente válidos mientras a uno le convenga que lo sean.

Se dice que el ser humano es un ser racional: piensa, razona, decide por si mismo. Toda una serie de cosas que (dicen) los animales no pueden hacer, y que por tanto nos hacen superiores. Pues bien, yo reivindico la llamada (por mi mismo) "Teoría del Ser Irracional". O dicho de otra forma, que eso de que somos racionales y basamos nuestras acciones más en razonamientos fríos que en sentimientos e instintos es una pura falacia, y además, mentira.

Cada vez que expongo esta creencia mia, siempre hay alguien que se lleva las manos a la cabeza. "Pero qué dices?! Tú estás loco?! No es verdad! Somos seres superiores! No somos animales!". Fair enough, como dicen los ingleses. Po fale, como decimos aquí.

Dice mi admirado Eduardo Punset (http://www.eduardpunset.es/blog/) en su libro "El viaje a la felicidad", que en todo proceso de decisión humana, los sentimientos tienen más influencia de la que todos pensamos. Sobretodo en el inicio y el final de la decisión. En el inicio, porque de repente hay algo que representa para nosotros una alteración de la rutina, una decisión importante que tomar, y eso siempre causa emociones. Por ejemplo, te ofrecen un trabajo nuevo. La primera emoción puede ser miedo, puede ser alegría, puede ser esperanza, ansiedad... pero siempre habrá una primera sensación. Luego empiezan los razonamientos y las comidas de tarro: que si me pagan más, que si puede ser interesante, que si puede ser muy estresante, que a ver lo que me voy a encontrar, que si total no estoy tan mal, que si patatín, que si patatán... Una ristra interminable de ideas que uno sopesa y que desembocan... en donde? En una conclusión racional fruto de una fórmula matemática? MENTIRA!!! (como decía el gran Prof. Palomino). Al final la decisión se toma ni más ni menos que por una emoción, un sentimiento. De repente nos damos cuenta de que ese trabajo es lo que has estado esperando toda la vida, o que te hace mucha ilusión ganar tanta pasta, o que no vale la pena arriesgarse... pero eso no es el resultado de ningún balance, puesto que si tuviéramos que hacer balance y concluir una decisión a tomar, no acabaríamos nunca y quedaríamos atrapados en un bucle infinito. Qué peso le damos a cada criterio? Como puntuamos las características de un trabajo que en realidad no sabemos como va a ser, porque aún no lo hemos aceptado? Así que decidimos porque una emoción nos hace decidir.

Cuando leí esto explicado por el Sr Punset me pareció entender muchas cosas de la vida.

Vosotros direis, bueno, pero de ahí a decir que el hombre es irracional... va un trecho. Y además es prostituir la teoría del buen Sr Punset. Bueno sí, claro, pero tenía que captar vuestra atención con un principio impactante, si no, quién se va a leer todo este rollo? Por supuesto que el hombre tiene una mayor capacidad de razonamiento que el resto de seres de este planeta, pero la base de mi mensaje es simplemente eso, que las emociones, instintos y sentimientos pesan muchísimo más de lo que nos pensamos.

Aún diré más, y esto es otra cosa que también provoca aspavientos cuando lo afirmo: las ideas políticas son, en muchas ocasiones, como el fútbol. Uno no es de un equipo porque sea el mejor, ni porque haya hecho un estudio de cual es el equipo que, racionalmente, es más lógico apoyar, sino simple y llanamente porque uno tiene unos colores, los de su equipo, que ha defendido desde el principio de sus días por la razón más antigua del mundo: porque sí.

Pues en la política pasa lo mismo. Uno tiene unos colores porque los siente, no porque un razonamiento lógico y meditado lo haya llevado a esa conclusión.

De hecho, esto me lleva a otra teoría mia, que quizás desarrolle otro día (si da para tanto, que no creo): la Teoría de la Decisión a la Inversa. Básicamente afirma que muchas decisiones las tomamos a la inversa, esto es, no por el proceso lógico:


  1. Razonamientos y valoración
  2. Decisión (en función de la valoración)

; si no completamente al revés:

  1. Decisión (en función de una emoción, los "colores")
  2. Búsqueda de argumentos y razonamientos que puedan defender esa decisión

Pues las ideologías políticas son lo mismo: uno primero decide cual es la que siente, o la que le conviene, y luego busca los argumentos que (teóricamente) le han llevado a decidirse por esa ideología. Y qué pasa? Que como casi todo es defendible en este mundo, la mayoría de las veces cuela.

En fin, que mi querida hermana mayor me va a echar los trastos por la cabeza en cuanto lea esto, y va a decir eso de: "Este tío es un melón", pero para eso está internet, para decir y defender melonadas.

Eso sí, pido disculpas al Sr Punset por utilizar sus respetables teorías para defender mis burdas y rudimentarias elucubraciones. Pero, una vez más, esto no hace más que reafirmar lo que decía antes. :)

Seguiremos en contacto.

Buenas noches.

jueves, 23 de abril de 2009

Burrocracia (3ª parte)

Lejos de desanimarme en mi particular lucha contra las complejidades de la burocracia, cada nuevo inconveniente me estimulaba a seguir luchando... Bueno, vale, estoy hasta las narices, pero ya que hemos llegado hasta aquí, no es cuestión de rajarse ahora.

Así que el otro día llamo a la propietaria de mi piso, la señora Fulanita de Tal y Tal, una señora muy amable con la cual me llevo estupendamente bien. "Señora Fulanita, pues verá, es que tengo un pequeño problema...". Y le explico (por enenenésima vez) mi aventura, pidiéndole si por favor puede contactar con su entidad bancaria para que, al cobrar en alquiler, apunten toda la dirección completa en el concepto de la transacción. Me aseguro de repetirle que por favor envien la dirección completa, código postal incluído, porque a estas alturas ya empiezo a conocer un poco el percal, y no tengo ganas de más problemas.

La Señora Fulanita accede amablemente a hacer lo que le pido, pero el lunes porque hoy su marido tiene que ir al médico. Yo le digo que no se preocupe, que a estas alturas no hay urgencia.

El lunes siguiente recibo una llamada de la Señora Fulanita, sobre el tema en cuestión. "Pues es que resulta que en mi banco me han dicho que ellos envían la dirección completa, así que si no sale en el recibo, debe ser problema de tu banco. Tendrías que llamar a tu banco, tal y cual...". Total, que me planteo llamar a mi banco, pero en ese momento se activa automáticamente mi "deformación profesional", experimentada en el campo de la creación de aplicaciones informáticas y el trato con usuarios. Me viene una imagen a la cabeza, en la que yo mismo estoy intentando convencer a la señorita operadora de mi entidad bancaria de que, en un campo de un recibo que solo el dios de la informática sabe qué información está mostrando, se tiene que mostrar en vez de eso... y me siento cansado, muy cansado. Me siento en la cama deshecha, con la cabeza enterrada entre las manos. El mundo no puede ser tan complicado. Acaso la era de la informática nos está complicando y dificultando mucho más la vida, en lugar de facilitárnosla? No puede ser todo tan complicado...

Cuando termino de llorar a voz en grito, decido reponerme y buscar una vía de ataque alternativa. Así que decido que necesito otro plan: la factura de la luz. Llamo a la compañía de la luz y le explico a la señorita que en la factura mensual aparece como titular otra persona que no soy yo (una tal Nuria Vives, que yo desconozco completamente), pero que yo estoy pagando la factura. Así que necesito aparecer yo como titular por un tema administrativo, y pregunto que como tengo que gestionar eso, esperando que me redireccione a cualquier otro departamento y así empezar una nueva transacción también interminable. Pero... oh, sorpresa... "No hay problema, señor". Me pide mis datos, y en un plis plas el cambio de nombre está hecho por teléfono, y la señorita me asegura que en la próxima factura, yo apareceré como titular.

Me sorprende la facilidad de la transacción. Será porque, en esta ocasión, hay pasta de por medio? No hombre no, que desconfiado eres. Es que cambiar una dirección en el padrón municipal, como todo el mundo sabe, es una gestión mucho más complicada y peligrosa, y que requiere de una serie de medidas de seguridad adicionales para evitar que los espías del KGB se metan en los archivos del CESID, que Ossama Bin Laden pueda cometer otro atentado parecido al de las Torres Gemelas, y que los polos se derritan causando así el final de la vida en la tierra.

Total, que esta es la situación actual. Ahora el siguiente paso es esperar que llegue la próxima factura de la luz, donde teóricamente apareceré yo (y nadie más que yo) como titular, y así podré ir a cambiar mi dirección en el padrón municipal sin problema ninguno y en menos que canta un gallo. Y después podré ir a la Seguridad Social, con el papelito que me den en el padrón, e inscribirme en el CAP de mi barrio, y podré votar, y quizás (imagino en un momento de ensoñación) incluso pueda, algún día no tan lejano, aparcar en la zona verde sin tener que pagar una pasta, y todas esas cosas que hace la gente normal. Los ojos se me llenan de lágrimas, así que me veo obligado a ir terminando este capítulo.

Estoy seguro de que esta vez funcionará, ahora sí que mis esperanzas se ven renovadas. Aún así, estoy pensando que tengo un primo karateka (el que sale en la foto) y que me lo voy a llevar la próxima vez que vuelva por el Ayuntamiento... por si las moscas.

Continuará...

miércoles, 22 de abril de 2009

Burrocracia (2ª parte)

Así que una vez más pongo la casa patas arriba, buscando en esta ocasión un recibo del alquiler del piso que me permita, de una vez, demostrar cual es mi residencia a los ojos de las desconfiadas entidades públicas. Por fin encuentro el maldito recibo!! Esta vez nada puede fallar!! Al día siguiente iré una vez más a la oficina del Ayuntamiento y efectuaré el cambio de dirección de una vez.

Al día siguiente, voy una vez más a la oficina. Hago la cola de rigor para que me den el numerito, pero esta vez, ya escarmentado, decido preguntarle a la señora funcionaria sobre la validez del documento, y así ahorrarme hipotéticas esperas innecesarias (esto de la burocracia cada día se me da mejor, ya no se me escapa ni una). Explico por enésima vez toda la historia de pe a pa, y le muestro el valioso recibo de alquiler. Lo examina y, para desesperación mía, suelta:
"Uy, pero aquí no pone la dirección del piso".

...

Tras unos segundos de inconsciencia (seguramente mi cerebro se desconectó automáticamente para no sufrir una sobrecarga o algo parecido), reacciono, miro el recibo y le digo "Bueno, pero aquí está el nombre de la propietaria, Fulanita de Tal y Tal, mire, mire. La misma Fulanita de Tal y Tal que aparece en el contrato, que ya traje y tengo aquí...". Me interrumpe para decir con la mayor indiferencia "Sí, pero tu puedes vivir en cualquier piso que sea propiedad de esa señora. Esto no sirve.". Total, que con una mezcla de ira y súplica, intento hacer comprender a la funcionaria que es la tercera vez que me presento allí, que no es posible que sea tan difícil cambiar una simple dirección en el padrón municipal, que tal y cual... pero todo es en vano, "la normativa es la normativa", dice. Todos mis esfuerzos por convencerla no consiguen arrancar en ella más que bufidos de indiferencia.

Salgo de la oficina buscando a alguien que tenga pinta de tener la culpa de todos mis problemas, con intención premeditada de cometer un asesinato, pero decido que no resolverá mi problema, así que me calmo y reflexiono. Esto no puede acabar así, no puedo dejar que me venza la maldita "burrocracia". Han ganado una batalla... vale, tres... pero no la guerra. En mi mente se va trazando un plan maquiavélico...

Continuará...

viernes, 17 de abril de 2009

Burrocracia (1ª parte)


Hoy, con todos ustedes, una emocionante historia basada en un hecho real. La epopeya (pues digna es de semejante nombre, más aún cuando todavía no ha terminado) narra las aventuras y desventuras del protagonista (yo) para intentar cambiar su dirección en el padrón municipal, y de esta forma poder votar, ir a la Seguridad Social, y todas esas cosas que hace la gente normal.

Pues resulta que voy a la oficina del Ayuntamiento de mi barrio (Hostafrancs, en BCN) el otro día, dispuesto a actualizar mi dirección en el padrón municipal. Para ir ya preparado (hombre prevenido vale por dos) llevo conmigo el contrato de alquiler del piso en el que vivo, en previsión de que seguramente me pedirán un documento que acredite que efectivamente resido en el barrio.

Entro, veo un mostrador a la entrada donde reparten los números de turno y "oh, maravilla", no hay casi cola. Voy al mostrador, donde una señorita muy amable me pregunta que deseo. "Pues quería cambiar mi dirección en el padrón". Me pregunta si traigo el contrato. "Si es que no se me escapa una", pienso yo, "todo va rodao". Así que la señorita me da un número y entro adentro.

Como casi no hay gente, me atienden enseguida en uno de los mostradores. "Pues que quería cambiar mi dirección en el padrón, aquí tiene el contrato", le digo al señor. El señor se lo mira, pone cara de contrariedad, y dice "Uuuuuy, este contrato está caducado, es valido sólo por un año". Pero yo, que voy preparado para cualquier contratiempo, le respondo "Sí, pero es prorrogable a 5 años, lo dice aquí, en esta cláusula, mire, mire". El señor se la lee y dice con indiferencia "Sí, aquí pone que es prorrogable, no que haya sido prorrogado". Ante semejante argumento, por supuesto, me deja desarmado. Le digo "Bueno, y que tengo que hacer?". "Pues me tiene que traer una factura de la luz, del gas o del agua".

Parece que no iba tan preparado después de todo, pero esta pequeña adversidad no puede vencer a mi firme voluntad de conseguir mi meta. Así que voy a casa y la pongo patas arriba (soy un poco desordenado, sí) hasta encontrar una factura de la luz, donde... "ajá! Figura mi nombre!". Esta vez nada puede fallar. Nadie dijo que sería fácil, pero esta vez es la buena.

Voy otra vez a la oficina, donde en cuestión de pocos minutos se ha formado una cola tremenda. Parece que todo el mundo ha decidido venir a la misma hora. Qué mala suerte. Hago cola durante unos minutos, otro señor me da número otra vez. Me pregunta si traigo el contrato, por supuesto, pero no considero necesario aclararle que ya he venido antes, así que le digo que sí. Después de todo, esta vez todo irá bien. Dentro hay un montón de gente esperando, la mayoría inmigrantes. Me siento a esperar. Hay una mujer que parece peruana, con un niño en un carrito. El niño tiene un aspecto bastante gracioso, con ojos achinados, cara de pan de quilo y corte de pelo a lo Juana de Arco. Se acerca un gitano que entra en la sala con su madre, una gitana de las que parece que te van a leer la mano, y si no quieres te echan una maldición que te cagas para el resto de tu vida. "Mira, mira! Que niño más gracioso! Se parece a ese que sale por la tele, el Machu Pichu! Qué divertida es esa serie! No será el Machu Pichu su padre?" le dice ni corto ni perezoso el gitano a la señora peruana. Ella niega amablemente para despejar toda duda sobre la paternidad del crío, cosa comprensible por otra parte. Yo me pregunto que le parece a la señora que llamen Machu Pichu a su crío, pero parece que ya es mi turno. Por fin!!

Entro al interior. Otro mostrador, otra señora con cara seria. Le explico la historia, "es que he venido antes... blablabla... así que aquí traigo la factura de la luz, aquí está mi nombre". La examina cuidadosamente, y dice "Uy, sí, pero el titular no eres tú, es una tal Núria Vives, mira, mira aquí". Tú solo eres el destinatario de la carta. Se me pone cara de tonto. "Bueno, pero si mi nombre sale ahí, es porque pago yo la factura". "Tú puedes pagar las facturas de toda Barcelona, si quieres, pero esto no sirve". No me lo puedo creer. Empiezo a pensar que hay una cámara oculta en alguna parte, pero como no me parece adecuado preguntar donde está, le pregunto a la señora qué tengo que hacer entonces". Me dice que traiga el recibo del último alquiler.

Salgo de la oficina con un cabreo del quince. El recibo del último alquiler, vete a saber donde está eso, además ya es tarde y tengo que ir a trabajar, así que debo posponer la operación para otro día. No pasa nada!! Seguro que debo tener el dichoso recibo por alguna parte, y esta vez nada podrá impedir que me empadrone!!

Continuará...

martes, 14 de abril de 2009

Dark was the night, cold was the ground


Y Shadowman se compró un dobro. Y dijo "Oh well" con voz profunda y enronquecida por el licor de maíz. Y mientras la luz del atardecer cubría los campos de algodón de color dorado, rasgó las cuerdas de su instrumento y puso en su blues toda su pena y su dolor...

Ok, no es así exactamente. Simplemente se compró un dobro, porque siempre ha sido un poco friki a su manera, y como no, tenía por lo menos que hacer un intento de tocar esta hipnótica melodía de Blind Willie Johnson (el tipo de la foto). Este si que decía "Oh well", y cantaba con voz de whisky. Debió de grabar esta canción alrededor del 1930. Tela marinera.

Esta es la humilde versión de Shadowman. Una vez más imperfecta pero sentida. Además, a Willie también le sonaban las cuerdas que no tenían que sonar cuando le daba al slide, que lo he oído yo :P

sábado, 11 de abril de 2009

Voces femeninas

Siempre me he dado cuenta de que, en cuestión de música, nunca ha habido muchas voces femeninas que me emocionaran demasiado. Supongo que quizás un servidor se identifica más con una voz carajillera como la Tom Waits o Joaquín Sabina, no sé. El caso es que, sobretodo recientemente, me he dado cuenta de que existen (como mínimo) dos señoras cuya voz me parece de lo más bonito que he escuchado nunca.

La primera es Emmylou Harris, figura de la música country americana. Dicen que la descubrió en 1971 Chris Hillman, entonces ex-miembro de The Byrds, y que quedó impresionado por su voz cuando la vio cantando una noche en un garito. Me pregunto yo si el hecho de que Emmylou fuera en aquel entonces una joven bastante atractiva (como puede verse en la foto) no impresionaría también bastante al Sr Hillman. Sí, ya lo sé, todos los hombres somos unos cerdos. Pero bueno, precisamente por eso sé de lo que hablo. A mi desde luego me presentan a un ángel con esa voz y le pido matrimonio inmediatamente - "Emmylou, que te iba a decir... que si quieres casarte conmigo?"
Bueno, a lo que iba, que me lio!!! ... aquí va una muestra. A dúo con el inigualable Mark Knopfler.





La segunda... bueno, sobre la segunda empezaré explicando que, no hace mucho, me encontraba yo en casa de mi hermana jugando con ella y sus amigas al karaoke (a mi esto de hacer el ridículo siempre me ha ido bastante). Cuando ya no sabía yo que canción destrozar, me dicen las niñas "Oye, tú tendrías que cantar la canción de la rubia esa". "La rubia, que rubia? Y porqué?" pregunté yo, no sin extrañeza. "Porque la canción esa te va a ti". Así que, ni corto ni perezoso, busco la canción de "la rubia esa" en la maquinita del diablo, y cual no sería mi sorpresa cuando la cantante resultó ser (nada más, pero sobretodo nada menos)... que Dolly Parton!!!! Y la canción... "9 to 5"!!!.

Evidentemente, canté la canción sin pensármelo dos veces, pero no pude evitar preguntarme qué impresión le había estado yo dando a mi hermana pequeña durante los más de 20 años que hace que intento que me tome en serio, y sobretodo, porqué sus amigas piensan que a mi "me va" esa canción.

Pero bueno, me da igual, y ahora he decidido salir de este armario musical y admitirlo... me gusta Dolly Parton!! Sí, que pasa!!! Y además, en esta ocasión estoy hablando puramente de una cuestión musical, y no tiene nada que ver con el tamaño de sus pechos, que también deu n'hi dó (tampoco podía dejar de comentarlo) :P

Total, que hace poco he descubierto que esta señora sabe cantar cosas como esta. Juzguen ustedes.

De vuelta

"Hola, oscuridad, mi vieja amiga,
he venido a hablar contigo otra vez.
Porque una visión, arrastrándose suavemente,
dejó su semilla mientras dormía.
Y la visión, sembrada en mi mente,
aún sigue ahí.
En el sonido del silencio."

Shadowman ha vuelto.